Tundra

La tundra es un bioma que se caracteriza por la existencia de un subsuelo helado, un clima frío, vientos fuertes, escasa lluvia y poca fauna y vegetación. Es propio de las altas latitudes y ocupa, en promedio, un 10 % del territorio terrestre.

Es un paisaje alejado de las civilizaciones humanas y cuyo nombre se traduce literalmente como “llanura sin árboles”, aunque también se le conoce el desierto polar. En la tundra la poca vegetación que existe consiste en musgos y líquenes con un ciclo muy corto de vida.

En la superficie de la Tierra se pueden encontrar básicamente tres tipos de tundras, ubicadas en el hemisferio norte por Alaska, Siberia, Canadá, Norte de Europa y Groenlandia.  En el hemisferio sur hay tundras en la Antártida, a los extremos de Chile y Argentina y en algunas islas subantárticas.

Características

La tundra tiene unas características muy específicas y distintivas, las cuales son las siguientes:

Clima

Por la proximidad de este bioma con los polos de la Tierra, su clima tiende a ser bajo cero durante casi todo el año. En los meses cálidos la temperatura puede alcanzar entre los 2 a los 5 ° C, pero en el invierno llega a ser de -20° C o menos.

Asimismo, sus inviernos son muy largos, con la prevalencia de vientos fuertes y la presencia de algunas nevadas que cubren la superficie. Las tundras que están cerca de las costas son más frías y con una abundante bruma.

En la tundra son muy pocas las precipitaciones y solo se registran entre unos 500 a 1.000 mm de lluvia por año. En el verano, ocurre el deshielo y los suelos se vuelven muy pantanosos y carentes de nutrientes.

Fauna

En la tundra existe muy poca fauna. Las especies que permanecen en este tipo de biomas deben hacer frente acondiciones climáticas muy adversas.

La principal característica de la fauna de la tundra es que tienen un pelaje muy espeso y abundante, lo cual les permite protegerse un poco de las bajas temperaturas. Casi siempre su pelo es de color blanco para mimetizarse con el ambiente.

Los animales más comunes que se encuentran en las tundras son los siguientes:

• Lobo ártico.
• Liebre polar.
• Caribú.
• Armiño.
• Oso polar.
• Búho nival, entre otros.

Flora

La poca vegetación que existe en la tundra permite que a este bioma se le clasifique como un desierto helado. Sus especies vegetales son de muy poca longitud de altura. De hecho, no sobrepasan lo 20 cm de alto.

Existen solo unas 400 especies vegetales en la tundra. Casi siempre estas plantas crecen en grupos o aglomeradas para protegerse del frío entre sí.

Sus raíces también son muy cortas y se esparcen hacia los lados, ya que el subsuelo es de hielo sólido. Esta condición es determinante para que únicamente se desarrollen plantas muy pequeñas.

Tampoco es común ver una capa vegetal continua, sino brotes de rizomas y algunas especies vegetales como por ejemplo:

• Líquenes.
• Hiervas.
• Abedul.
• Pastos con flores.
• Árboles enanos, entre otros.

Suelo

Su geología está determinada por una capa de hielo ubicada a poca profundidad, la cual se denomina “permafrost”. Por eso, el suelo de la tundra carece de nutrientes esenciales para el desarrollo de una abundante vegetación.

Lo que sí predomina es el carbono que ha quedado retenido en el permafrost por los distintos procesos geológicos a lo largo de la historia. Sin embargo, cuando los polos se derriten, estos gases se expulsan hacia la atmósfera, por lo que contribuyen con el efecto invernadero en el planeta.

Tipos

Existen tres tipos de tundras bien diferenciadas:

Tundra Ártica

La tundra Ártica se ubica entre Alaska, Rusia y Canadá. La mayor parte de suelo está constituido por permafrost, el cual se extiende por una gran parte del polo Ártico.

Es común ver en estas tundras algunos drenajes o turberas que se encargan de proporcionarle agua a las plantas. Su clima es uno de los más extremos, ya que puede situarse hasta por debajo de los -50 ° C.

En la época estival, es usual que la capa de hielo se derrita y que las temperaturas lleguen a unos 2° C. Por eso, muchas especies animales pueden aprovechar el verano para cazar y pastar en la tundra Ártica.

Dentro de la fauna que se encuentra en esa zona, se caracteriza el oso y el lobo polar. Estos animales son de un pelaje muy grueso y de un atractivo color blanco que se confunde con el ambiente.

Tundra Alpina

Como su nombre lo indica, son las tundras que se encuentran en las montañas, sobre el nivel del mar. Es el único tipo que no tiene un suelo congelado, puesto que la inclinación del terreno permite el drenaje apropiado.

La temperatura oscila entre los 6 a 7 ° C y los vientos son fuertes y frecuentes. Igualmente, la presión atmosférica en la tundra Alpina es muy baja, lo que dificulta la sobrevivencia de algunas especies animales. De hecho, son normales las migraciones de las especies durante el invierno.

Con respecto a su flora, son muy pocos los árboles que crecen allí, puesto que solamente predomina la vegetación herbácea, musgos y líquenes.

Tundra Antártica

Son las tundras más alejadas de la vida humana, en cuyo territorio no existen casi ningún tipo de especies de flora o fauna. Se encuentran localizadas en Sandwich del Sur, las islas Georgias y en una parte del hemisferio sur de la Tierra.

Su clima es uno de los más fríos del planeta, lo que evita que los mamíferos se desarrollen en ese territorio. Se puede apreciar alguna flora como musgos y líquenes, pero ningún tipo de árboles.

Importancia

Como todo bioma terrestre, la tundra es esencial para mantener el equilibrio biológico del planeta. Uno de sus mayores aportes al ecosistema es la presencia del permafrost en su subsuelo, el cual se encarga de contener grandes cantidades de carbono que se pueden convertir en metano y CO₂.

También, es el único sistema natural que encierra en su subsuelo datos y pruebas importantes sobre la evolución de la vida en el planeta. Por lo tanto, es fundamental aplicar las medidas necesarias que contribuyan a su conservación.

Amenaza para la tundra

La tundra encierra en su permahielo una gran cantidad de gases de carbono que poco a poco están siendo liberados a la atmósfera, debido al derretimiento de los polos terrestres. Dentro de las principales amenazas para este fenómeno se encuentran:

• La falta de suficiente ozono en los polos de la Tierra, lo que permite la penetración de una mayor cantidad de rayos ultravioleta en esa zona.
• La explotación de gas y petróleo en los polos terrestres que contamina y pone en un grave riesgo ecológico a las distintas tundras.
• La contaminación del aire que forma una niebla tóxica que daña las especies que habitan en ese bioma.
• Las construcciones hechas por el hombre en esos territorios, como edificios y carreteras, que atentan contra el equilibrio ecológico.

En definitiva, la contaminación ambiental y la explotación desmedida de los recursos naturales representa un grave problema para las tundras, ya que la liberación de los gases que hay en su subsuelo pone en riesgo la supervivencia de las especies.

Referencias

1. (2008) Tundra. En: Chesworth W. (eds) Enciclopedia de la ciencia del suelo. Serie Enciclopedia de Ciencias de la Tierra. Springer, Dordrecht. https://doi.org/10.1007/978-1-4020-3995-9_609
2. Del Pozo Campos, E. (2022). Los cimientos de la Tierra se derriten: El permafrost, el hielo eterno de la tundra, víctima e impulsor del calentamiento global. Alfa, (49), 50-55. Disponible en: https://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=8360827
3. Turabián Fernández, J. L., & Pérez Franco, B. (2020). Tundra. Revista Clínica de Medicina de Familia, 13(2), 143-145. Disponible en: https://scielo.isciii.es/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1699-695X2020000200007