Revolución industrial
La Revolución Industrial fue un proceso de cambio económico, social, cultural y tecnológico en Reino Unido durante el siglo XVIII. El crecimiento de la población a finales del año 1700, desató un movimiento que impulsó el desarrollo económico y tecnológico tanto en Inglaterra como en otros países de Europa. Por lo tanto, fue un período histórico caracterizado por la industrialización, en el cual surgieron máquinas que cambiaron radicalmente las condiciones de trabajo.
La Revolución Industrial tuvo cuatro etapas, en las cuales se establecieron diferentes mecanismos originados por ingleses y adoptados de países extranjeros como Estados Unidos y Alemania. Gracias a esta revolución, actualmente existen maquinarias que simplifican las tareas industriales, las cuales optimizan el tiempo de producción y disminuyen el desgaste personal. Por lo tanto, es importante reconocer su origen, etapas, características, inventos y consecuencias.
Tabla de contenidos
Origen de la revolución industrial en Inglaterra
Tuvo su origen hacia el año 1760 y concluyó en 1840 (siglo XIX). La Industrial textil es considerada como la fuente que inició la Revolución Industrial, sin embargo, la Revolución Agraria Británica fue quien empezó a generar mayor influencia en este movimiento, debido al aumento de demanda alimenticia. Muchos agricultores necesitaban diseñar artefactos que acelerarán la producción para beneficiar y satisfacer las necesidades básicas.
Gracias al carbón y el hierro, se creó una de las primeras maquinarias que inició el desarrollo de la Revolución Industrial: La máquina de vapor. Además de este invento, surgieron otros factores que dieron paso a la inversión para una tecnología más moderna y con mejores ventajas para la sociedad.
Causas
Son diversas las causas por las cuales se originó la Revolución Industrial. No obstante, se pueden clasificar en tres aspectos: político, socioeconómico y geográfico.
Políticas
La revolución burguesa triunfó ante el sistema feudal durante en el siglo XVII. Por lo tanto, no existía monarquía ni absolutismo, lo cual permitió que Inglaterra viviese una época con mayores libertades civiles, sin miedos revolucionarios y con mejor estabilidad.
Socioeconómicas
Inglaterra tenía abundancia en concentración de capitales gracias a la supremacía comercial. De hecho, las fortunas de los empresarios dieron origen a la comercialización de diferentes productos como el tabaco, té y los esclavos. Asimismo, al tener mayor producción, se necesitaba mayor mano de obra.
Todas las innovaciones dieron paso a un aumento de la productividad, por lo tanto, hubo un éxodo rural significativo que desplazó las actividades agrarias en el campo. Toda la población que se desplazó hacia la ciudad, eran la mano de obra necesaria para continuar con el desarrollo de las industrias.
Geográficas
Las materias primas existentes en el territorio inglés facilitó el proceso de creación y construcción. El carbón y el hierro fueron parte de los elementos esenciales para elaborar nuevas invenciones como la máquina de vapor. Además, comerciaba con países extranjeros mediante el barco de vapor.
Características
Las principales características de la Revolución Industrial son:
- Cambio en la estructura productiva.
- Uso del carbón como fuente de energía principal.
- Transformación en los hábitos de consumo.
- Incremento de la población urbana.
- Aumento en la productividad.
- Aumento de la producción mecanizada.
- Mejoras significativas en los medios de transporte.
- Avance en la tecnología.
- Cambios en la estructura social.
- Expansión industrial y económica.
- Transición del sector primario al sector secundario gracias a la industrial textil y metalúrgica.
Principales inventos
Algunos de los principales inventos que destacaron en la Revolución Industrial son:
- Máquina de vapor (1769).
- Barrena sembradora (1701).
- Motor de vapor (1705).
- Termómetro de mercurio (1714).
- Máquina de hilar (1767).
- Barco de vapor (1787).
- Desmontadora de algodón (1793).
- Alumbrado de gas (1802).
- Ferrocarril (1814).
- Bicicleta (1817).
- Máquina de escribir (1829).
Consecuencias
Las consecuencias de la Revolución Industrial afectaron a diversos ámbitos económicos y sociales. Por lo tanto, se pueden simplificar en 3 hechos, los cuales fueron:
- Cambios económicos y sociales: el proletariado industrial fue la nueva clase social que surgió producto de este proceso histórico. De hecho, a partir de este nuevo target, se dio paso a las ideas socialistas y el origen del sindicalismo.
- Mecanización del trabajo: al crearse máquinas eficientes que cumpliesen con la tarea productiva, hubo un aumento de la producción y un descenso del trabajo artesanal.
- Crecimiento de la urbe y éxodo rural: las estructuras de las ciudades se modificaron considerablemente debido al desplazamiento poblacional de los campos hacia las urbes. El tamaño de los espacios de convivencia eran muy reducidos, lo cual generó graves problemas de salud.
Etapas y evolución
La evolución de la Revolución Industrial se puede resumir en 4 etapas: desde la primera hasta la cuarta revolución, en las cuales se desarrollaron diferentes inventos sociales que aumentaron notablemente la calidad de vida de todos los habitantes.
El inicio de la revolución en Francia y otros países de Europa
La Revolución Industrial se extendió a otros países de Europa como Francia. Se desarrolló lentamente durante el siglo XIX debido a distintas situaciones tales como: escasez de materia prima, lento crecimiento demográfico y que la clase campesina poseía un derecho total y absoluto sobre sus propias tierras. A pesar de esto, la Revolución Industrial en Francia generó diversas transformaciones en el ámbito económico, social y cultural.
En Francia, la Revolución Industrial marcó un antes y un después muy distintivo que lo diferencia de los demás países del continente. Pues pasó de depender de la economía agraria y trabajos artesanales a ser dependiente de la industrialización y su aplicación a la producción masiva. Con ello empieza la construcción de fábricas dedicadas a crear inventos útiles para la producción, ejemplo de ello son la trilladora, sembradora, barco a vapor, telar mecánico, entre otros.
En otros países de Europa, la Revolución Industrial se fue dando de forma paulatina gracias al uso del carbón y los nuevos beneficios en cuanto a rentabilidad y productividad que traía consigo esta nueva ola.
Segunda revolución industrial
A principios de 1870, empieza la creación masiva de trenes y ferrocarriles indispensable para el transporte del ciudadano. Por lo tanto, nace la nueva industria del metal, crece la industria química, de creación y distribución de bienes petroleros.
Asimismo, la industria eléctrica se encontraba en pleno desarrollo y la industria automotriz complementó la Segunda Revolución Industrial. Estados Unidos y Alemania se convirtieron en los principales productores industriales del mundo.
Tercera revolución
Esta revolución es conocida como la era de la informática. Se comienzan los procesos de automatización y se crean las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC). De esta manera, se asientan tanto el desarrollo de energías renovables como las nuevas tecnologías lideradas por la Unión Europea, Japón y Estados Unidos.
Cuarta revolución
La cuarta revolución empieza con la era de la digitalización. Hay transformaciones en las tecnologías informáticas que dan origen a Internet. Se amplían las comunicaciones, se crea inteligencia artificial, robótica, nubes de almacenamiento digital, entre otros.
A modo de conclusión, la Revolución Industrial fue un hecho histórico que dio paso al desarrollo social, económico, tecnológico y cultural en el mundo. Todas las revoluciones siguen vigentes y proporcionando diferentes beneficios para la sociedad.