Ganadería

La ganadería es una de las actividades económicas con mayor antigüedad en el mundo, junto con la caza, la pesca y la recolección. A través del tiempo, esta ha sido una práctica fundamental para el desarrollo de la civilización y la economía. Ocurrió un proceso de adaptación largo de domesticación para que los animales se adaptaran a la presencia humana y en la actualidad, requieren de sus cuidados para subsistir.

Tras conocer esta breve referencia histórica con respecto a la importancia de la ganadería, es interesante conocer más a detalle este proceso a lo largo del tiempo y lo que esta actividad conlleva. Tener noción del concepto de ganadería, así como las características de esta actividad y sus diferentes clasificaciones que pueden ser en función del proceso de cría o del tipo de ganado es importante. Como así también la importancia de esta actividad y su fuerte impacto al medio ambiente.

Definición

Es una actividad económica que consiste en criar animales domesticables para explotar su carne u otros beneficios, que pueden ser alimenticios o con fines industriales. Dependiendo del ganado se pueden obtener diversos productos, pero los más comunes son: la carne, el cuero, el huevo, la leche y sus alimentos derivados.

Por otro lado, puede ser importante definir el término “Ganado”, este hace referencia a los animales que conviven, se alimentan y desplazan en un mismo terreno. Estos son animales generalmente cuadrúpedos que son puestos en esta ubicación por la mano del hombre, bien sea por motivo de trabajo o para aprovechar su cargue.

Características

La principal finalidad de la ganadería es la producción de bienes de origen animal, como lo son los alimentos o la materia prima industrial. En consecuencia, forma parte del sector primario y tiene mucho peso en los países industrializados. Por otro lado, se requiere un espacio considerable para la práctica de esta actividad, lo que puede ser un factor limitante para algunas regiones.

Generalmente, esta actividad se lleva a cabo en llanuras amplias donde hay espacio para que los animales puedan pastar. No obstante, existen otros modelos de ganadería que permiten la cría de ganado en espacios reducidos. También es necesario considerar que hay lugares donde el clima no es propicio. Cada práctica tiene sus pros y contras que determinan el beneficio económico e inciden sobre medio ambiente.

Variedad de ganado

Los más conocidos son el ganado vacuno, ovino y porcino que corresponden a las vacas, ovejas y cerdos respectivamente. No obstante, existe una gran diversidad en la actualidad gracias a la variedad de productos en el mercado de origen animal. Algunas otras especies comunes para criar son las cabras, los caballos y las aves de corral como el gallo y la gallina. Estos últimos técnicamente no son considerados ganado.

Como ocurre con la gallina, hay ciertas especies que se crían para su producción en masa, aunque no sean considerados ganado por no ser animales cuadrúpedos. Entre estos se encuentran los conejos, los peces, las abejas, los caracoles y los gusanos de seda. Incluso, en algunas regiones se da la cría de grillos para la alimentación de los reptiles que algunas personas tienen como mascotas.

Clasificación o tipos

Existen diferentes aspectos en los que se puede basar para dividir los tipos de ganadería, siendo el principal el proceso de producción. De igual manera, también se detallarán otras clasificaciones, las cuales son:

Según el proceso de producción

Esta clasificación hace referencia al medio ambiente en el que se alimentan y crecen los animales, el cual puede ser un ambiente controlado bajo techo, al aire libre o una combinación de ambas. Así mismo, hay varias prácticas que involucran el traslado del ganado o se distinguen precisamente por el proceso de alimentación, a continuación cada uno de los tipos:

• Ganadería intensiva: Consiste en criar a los animales en un ambiente con las temperaturas adecuadas, así como los alimentos y cuidados necesarios para una producción más sana y rápida. Esta práctica genera un alto consumo energético y se caracteriza por la estabulación del ganado.
• Ganadería extensiva: Se lleva a cabo en grandes extensiones de terreno como montañas, pastizales y prados. En esta, se traslada a los animales que puedan adaptarse al campo en el que van a pastar, con el fin de aprovechar los recursos naturales del mismo. Este tipo de ganadería promueve la conservación del ecosistema y no implica un importante gasto de energía.
• Ganadería mixta: También puede encontrarse como ganadería semi-intensiva, semi-extensiva o semi-estabulada. Se trata de una combinación entre estas dos prácticas (intensiva y extensiva) para sacar provecho tanto de los establos como de los recursos naturales en el campo abierto.

Según el ganado

Los tipos de ganadería también pueden depender del tipo de ganado que se utilice. A continuación se nombrarán las diferentes clasificaciones de esta actividad según la variedad de ganado que se críe:

• Vacuno o bovino: Es el manejo de toros, vacas y bueyes, generalmente para obtener carne o leche.
• Ovino: Es cuando se cría ovejas y corderos para obtener su piel, lana y su leche.
• Porcino: Es un conjunto de cerdos, utilizados principalmente para obtener su carne.
• Equino: Se constituye de la cría y manejo de caballos y yeguas, principalmente para la actividad hípica.
• Caprino: Es el manejo de cabras para obtener carne y leche, popular para la fabricación de queso.
• Avicultura: Es la cría y manejo de aves de corral, esto para aprovechar tanto la producción de huevos como su carne.
• Apicultura: Para la obtención de miel se crían abejas.
• Sericicultura: Es el conjunto de técnicas usadas para criar gusanos de seda y obtener este material para la producción textil.

Impacto ambiental

Al tratarse de una gran cantidad de animales los que se crían, alimentan y trasladan en masa, existe cierto nivel de influencia sobre el medio ambiente. Aun cuando son muchos beneficios derivados de la ganadería, también hay muchos efectos negativos que son los siguientes:

• Deforestación: Se requiere mucho espacio para la ganadería, lo que da origen a la tala de árboles y al pastar, los animales pueden alimentarse del brote de árboles jóvenes con lo que se retrasa la reforestación.
• Pérdida de biodiversidad: Junto con la deforestación se incluye la destrucción del hábitat natural de miles de especies, lo que conlleva a la pérdida de la biodiversidad en esos territorios.
• Proliferación y desarrollo natural de las bacterias: La práctica de la ganadería intensiva suele ser acompañada por el uso constante de antibióticos, pare evitar infecciones y enfermedades. Con el paso del tiempo, esto contribuye a que se generen bacterias resistentes al medicamento.
• Producción excesiva de gases de invernadero: La cría de grandes grupos de animales puede contribuir con el efecto invernadero al producir una enorme cantidad de gas metano a través de sus gases intestinales.

Importancia

Desde tiempos antiguos, la ganadería ha constituido una de las principales fuentes de alimentación de la humanidad, por lo que ha formado parte esencial del desarrollo de la humanidad y continúa siéndolo en la actualidad. La dieta diaria de muchas personas proviene de la ganadería, los ejemplos más comunes son la carne y la leche de vaca o los productos derivados de la misma.

Es una actividad esencial en el sector primario para la producción y venta de alimentos u otros productos cuya materia prima es de origen animal. En este sentido, es importante mencionar que este hecho convierte a la ganadería en una importante fuente de empleos. Además, constituye una parte fundamental del sistema económico de la mayoría de los países y regiones por su alto aporte a la actividad comercial.

Como puedes ver, la ganadería es un elemento con mucha influencia en el desarrollo de la civilización humana y su economía. Son muchos los beneficios que se pueden obtener con los diferentes tipos de ganado, pero puede ser interesante evaluar el impacto ambiental que genera.